El verano ha traído a Flor de Canela horas y horas de piscina, de percibir sus límites y de tratar de llegar un poco más lejos…
El verano ha traído noticias de China, de sus orígenes… lo que le ha permitido decidir que de ese tema se ocupará cuando sea mayor… qué ahora tiene muchas cosas que hacer más importantes y emocionantes…
El verano ha pulverizado el peso de las mil horas de colegio, inmovilizada ante un pupitre, con la mochila llena frustración y miedos a hacerlo mal… a no cubrir las expectativas de nosotros los adultos… de obligaciones y reglas…
El verano le ha regalado experiencias para aprender: el golpe con el coche, el accidente casero de la abuela, la muerte de la pajarita, la boda de nuestra Argine, libertad…
El verano le ha ofrecido nuevos amigos con los que ha compartido secretos nuevos, con los que se ha enfadado, pegado y aprendido a negociar y a ceder o no ceder… amigos con otros horizontes que le han ayudado a ser más ella misma.
El verano es un buen amigo que le ha permitido tomar sus decisones, dormir fuera de casa, explorar caminos, la noche…, horas y horas lejos de sus padres…
El verano le ha acompañado a crecer varios centímetros y a crecer en cosas que ningún metro puede medir… se ha estrechado nuestro vínculo como familia… como madre e hija y al mismo tiempo nuestra hija se ha hecho más autónoma.
¡¡ Verano, buen amigo de los niños, te vamos a echar de menos… hasta pronto, si Dios quiere!!
Cuaderno de retazos 